Ahora tengo la oportunidad de satisfacer estas curiosidades gracias a Don Joaquin Audina, vecino de Alcubierre, que a sus 90 años conserva una cabeza lúcida y una memoria envidiable. Además se ha ofrecido a compartir conmigo sus recuerdos.
Mi intención no es la de escribir un libro, ni hacer un estudio de antropología, sino mas bien ser la imagen (ya desaparecida) de la abuela que cuenta historias, o como hoy se dice, una cuenta-cuentos.
(Fotografía: Olivar)